GALLETAS DECORADAS 8: Decoración de una galleta paso a paso

El tutorial de hoy es el último de una serie de tutoriales de galletas decoradas para principiantes que he estado publicando desde hace una semanas y en él os enseñaré, paso a paso, cómo decorar una galleta con glasa real. Las galletas de este tutorial son las que hice para el día de San Valentín utilizando un cortador con forma de corazón, pero podéis utilizar la misma técnica para hacer otras galletas con otras formas y diseños.

Para hacer estas galletas necesitaréis:

• Unas galletas para decorar con forma de corazón
• Glasa real
• Mangas pasteleras (entre 3 y 5 unidades)
• Adapatadores (entre 3 y 5 unidades)
• Boquillas del número 1 (entre 1 y 3 unidades)
• Boquillas del número 1,5 (1 o 2 unidades)
• Boquillas del número 2 (2 unidades)
• Biberones (2 unidades)
• Punzón (también os puede valer un palillo)
• Colorantes en pasta: turquesa, naranja, marrón, negro y blanco (opcional)
• Rotulador de tinta comestible
• Pintura en polvo de color rosa o rojo
• Pincel redondo

NOTA 1: Si utilizáis el truco del film necesitaréis menos mangas pasteleras y adaptadores.
NOTA 2: Una vez que no necesitéis más glasa de un color, podéis lavar la boquilla que hayáis usado y secarla bien para utilizarla de nuevo, pero si no queréis perder tiempo mientras estáis decorando necesitaréis tener más boquillas.

1. Apartar la glasa real necesaria para hacer la mitad blanca del corazón, la cantidad la tendréis que calcular a ojo y dependerá de las galletas que queráis decorar; si queréis que quede todavía más blanca podéis añadirle colorante blanco. Empezar a preparar una manga pastelera con la glasa de delineado utilizando el truco del film y dejarla envuelta y anudada (para que no se seque) mientras preparáis la glasa de relleno. Podéis aprovechar la media hora de reposo de la glasa de relleno para dibujar en todas las galletas la línea que divide los dos colores de la base; para ello utilizar un rotulador de tinta comestible. Cuando la glasa de relleno esté lista, meterla dentro de un biberón. Después, terminar de preparar la manga con la glasa que teníais envuelta y con una boquilla del número 2.
Ya estáis preparados para empezar a decorar. Lo primero que tenéis que hacer es dibujar el contorno de la zona blanca (delinear). Yo siempre que delineo zonas grandes lo hago en dos veces: primero delineo la parte de la izquierda, después giro la galleta 180º y delineo la otra parte (no hagáis caso a la foto que segunda línea la he hecho sin girar); y una vez que esta todo delineado disimulo las uniones de las dos líneas dando golpecitos con un pincel plano humedecido (así parece que la línea se ha hecho de una sola vez).
Tanto para dibujar contornos como para hacer líneas pequeñas y escribir lo que tenéis que hacer es lo siguiente: Colocar la manga pastelera en un ángulo de 45º, tocar la galleta con la punta de la boquilla y presionar ligeramente. Una vez que salga un poco de glasa, levantar la manga unos milímetros y desplazarla por la galleta lentamente y ejerciendo una presión constante. Cuando queráis acabar la línea, dejar de presionar y tocar de nuevo la galleta con la punta de la boquilla.

2. Inmediatamente después, rellenar con la glasa de relleno haciendo una espiral que vaya desde el borde hasta el centro. No es necesario cubrirlo todo.

3. Ahora pasar un punzón por toda la superficie, haciendo movimientos circulares, para cubrir bien todos los huecos. Para terminar y para ayudar a que la glasa se distribuya uniformemente y quede así una capa lisa, mover la galleta rápidamente de izquierda a derecha, pero manteniéndola siempre en posición horizontal.
Repetir estos tres pasos con todas la galletas. Después tirar la glasa de relleno que os haya sobrado (ya que no puede volver a utilizarse) y conservar la de delineado en la misma manga para utilizarla más tarde, cuando la primera capa haya secado. Si hacéis bastantes galletas, cuando terminéis de decorar la útima, la primera ya estará lo suficientemente seca como para poder añadir detalles encima

4. Apartar la glasa real necesaria para hacer la otra mitad del corazón y teñirla de color turquesa. Después delinear y rellenar del mismo modo que lo hicisteis con la glasa de color blanco y conservar la glasa de delineado para más tarde.

5. Teñir un poco de glasa de color marrón y añadir agua poco a poco hasta que la glasa tenga una consistencia intermedia. Meterla en una manga con una boquilla de número 1,5 y dibujar el contorno de la rama. Inmediatamente después rellenar con la misma manga.

6. Teñir un poco de glasa de color naranja y añadir agua poco a poco hasta que la glasa tenga una consistencia intermedia pero más espesa que la anterior, para que quede con más volumen. Meterla en una manga con una boquilla de número 1,5 y dibujar las patitas. Después dibujar el contorno de los picos y rellenarlos. Si os fijáis bien el pico del pajarito blanco está hecho en dos veces. Para que el pico de abajo y el de arriba no se fundan, hacer primero el de abajo y esperar a que se seque un poco antes de hacer el de arriba.

7. Ahora vamos a utilizar las dos mangas que teníamos reservadas pero cambiando antes las boquillas; en este caso utilizaremos una boquilla del número 1. Dibujar con ellas las alas de los dos pajaritos.

8. Teñir un poco de glasa de color negro, meterla en una manga con una boquilla del número 1 y dibujar los ojos y las pestañas (en el caso del pajarito blanco).

9. Para terminar, pintarle los coloretes al pajarito blanco. Para ello impregnar ligeramente el pincel con la pintura en polvo, retirar el exceso sobre papel de cocina y aplicar sobre los mofletes suavemente realizando movimientos circulares. Una vez que estén acabadas todas las galletas dejar que se sequen durante al menos 24 horas antes de guardarlas.

Las galletas decoradas se conservan perfectamente hasta 2 meses dentro de bolsitas individuales de celofán o en latas, pero si no se van a comer se conservan durante años. A mi como más me gusta regalarlas es en cajitas individuales, son más caras y las galletas se conservan durante menos tiempo, pero quedan mucho mejor; por eso sólo las utilizo para galletas muy especiales.

Bueno, pues aquí acaba esta especie de curso. Espero que os haya gustado y que hayáis aprendido mucho. Yo estoy muy contenta por la buena acogida que ha tenido, he recibido muchos comentarios positivos de personas que han seguido uno a uno todos los tutoriales y que han esperado con impaciencia el siguiente (siento haber tardado tanto, esto lleva su tiempo), incluso hay personas que han empezado a apasionarse por este mundo gracias a mí y la verdad es que eso me hace mucha ilusión.
Ahora, lo que tenéis que hacer es practicar. Recordar que si tenéis alguna duda podéis consultar en cualquier momento mi página de tutoriales (que suelo actualizar muy a menudo) y que podéis escribirme para preguntarme o contarme vuestros resultados.