El espíritu del lejano oeste.

No hace falta ser muy experto en moda para saber que lo vintage (o simplemente lo viejo) está más de moda de lo que nunca lo ha estado. Vivimos en la era de la nostalgia: tomando fotos con un iPhone en carcasa de casette para subirlas a Instagram después de usar el filtro earlybird.
Y no es para menos. Lo más bonito de las ciudades suele ser también lo más viejo. Comparen la colonia Roma con Santa Fe y hablemos de encanto. Un bar que tenga 80 años de recibir parroquianos seguramente será un buen bar. Lo nuevo está bien pero hay que darle tiempo para saber qué tanto. Lo viejo, si ha sobrevivido, seguramente es espléndido.

Hablar de ropa vintage, retro, de segunda mano o recuperada es un universo. Entre los diseños de la temporada actual de cualquier tienda low cost se pueden encontrar cosas que parezcan de antaño. Es innegable el encanto actual de unos lentes ochenteros auténticos (tal vez sobrevivientes en el clóset de tu mamá). Y hay boutiques que capitalizan eso que todos queremos, ya sea vendiendo ropa de segunda mano elegida con esmero -hola, Mercadillo Vintage- o de plano creando prendas nuevas inspiradas en aquellas de otros tiempos.

Lo cual es justo el caso de RRL & Co, una marca de Ralph Lauren, inspirada en la estética del lejano oeste norteamericano. Ropa para hombre y mujer además de todo tipo de accesorios -zapatos, carteras, cinturones, sombreros- que parecen sacados del baúl de una diligencia. Sólo parece pero lo parece muy bien.

Héctor, que tiene una marcada predilección por todo lo que se vea añejo, fue quién llamó mi atención sobre estas piezas. Las colecciones femeninas son muy bonitas: femeninas pero vagamente andróginas y llenas de carácter. La marca no es barata (y no hay en México) pero pinear no empobrece.

RRL & Co. está en 379 W Broadway, Nueva York.