Han terminado las fiestas, algunos se alegran y otros sienten cierta pena. Ya hemos recogido nuestro belenes y nuestro árboles.Es un período diferente, especial, donde los pequeños disfrutan mucho, y nosotros, los mayores, viéndolos. Quizás un poco viciado por el consumismo termina convirtiéndose, que pena, en un indicador económico.
Un momento de propósitos para el nuevo año, de anuncios propagandísticos del tipo "todo va bien","esto va mucho mejor", de ventas locas. Pero un momento dedicado a recuperar amistades, a estrechar lazos con los tuyos y con los más cercanos.
Hay quien decía que tenemos cinco estaciones en el año y la Navidad es una de ellas.
Ahora volvemos a la rutina después de este período convulso. Recordamos lo que fue la Navidad. También recuerdo las comidas que hemos hecho durante estos días.
Para los que nos apasiona la cocina es fantástico tener a los tuyos esperando en la mesa, poder enseñarles nuevas cosas y disfrutar con ellos. Lo importante es disfrutar con ellos estos días y las fotos y el blog queda en un segundo plano, pero algunos platos sí que puedo compartirlo con vosotros. Publiqué mi ensaladilla de pulpo a la gallega, quizás lo que más me ha gustado, pero tenemos más, por ejemplo, este arroz de pulpo y gambas que pusimos unos de estos días en reunión familiar.