sensaciones

Se presenta un jueves tranquilo, lleno de buenas sensaciones que comienzan a surgir en mí mientras visualizo estas fotografías, las cuales he escogido de manera cuidadosa. Reflejan un modo de vidas austero, lleno de sencillez y con una amplia visión del espacio y la luz, pero al mismo tiempo, ese abrumador vacío me recuerda una vez más, que muchos de los objetos que nos rodean no son todo lo necesarios como pensamos. Este ejercicio mental se propicia en Marruecos, un país en el que todavía la vida transcurre de forma lenta, saboreando el placer de las cosas hechas a mano: tejiendo, modelando, martilleado y experimentando todas las sensaciones que la vida nos brinda.

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Aquí estoy aprendiendo a vivir con lo que tenemos, nada de centros comerciales, nada de salidas al cine... es hora de dedicarnos a hacer las cosas por nosotros mismos y estoy empezando a coger la sartén por el mango (literalmente), ya que la cocina era una de mis asignaturas pendientes.