Hay días en los que me encanta ir elegante de los pies a la cabeza, y este día fue el sábado, nos fuimos a comer por ahí y aproveché para estrenar el bolso que me regaló mi marido para nuestro aniversario.
Me encanta cómo queda con este vestido, sencillo y uno de los más elegantes que tengo. Tiene distinto largo por detrás que por delante, y sienta como un guante. Hoy lo llevo sin cinturón, me apetecía ir suelta, pero también me lo pondré con un cinturón finito y me lo ablusaré, queda muy bonito también.
Este tipo de looks son los clásicos que pasa el tiempo por ellos y no pasan nunca de moda.