¿Un cafecito?

Extraño el café. De todo lo que he tenido que dejar entre embarazo y lactancia (cigarro, alcohol, lácteos y siestas de tres horas) lo que más extraño es el café.

Pasé años diciendo que la cafeína era mi droga favorita y burlándome de la existencia de los cafés descafeinados. Si, yo era de esas. Ahora agradezco que existan buenos descafeinados, aromáticos y sabrosos. Bienvenidos a mi vida, nuevos descafeinados de Nesspreso.

Me gusta Nesspreso, la verdad, con sus capsulitas de colores y sus máquinas relucientes. Me gusta no tener que lavar la cafetera y me gusta que tengan tantas y tantas opciones. En mi estado actual, me encantan los descaffeinato.

Ya les contaba sobre el tema en Los Tocinantes y ahora viene a cuento porque abrieron su nueva boutique, tan coqueta como las otras nueve que hay en México, esta vez dentro del Palacio de Hierro de Centro Coyoacán. Me encantó.

Oficialmente me he convertido en una señora. Señora Botica, para usted.