Tips para ponerte en forma este verano
Nos quedan 10 semanas para que oficialmente empiece el verano. Si quieres llegar a la siguiente estación con un cuerpo transformado del que poder presumir, tienes el tiempo justo para cumplir el objetivo. Para ello no nos queda otra forma que habituarnos a una rutina de gimnasio: ejercicio, nutrición y, a ser posible, la ayuda de un personal trainer que nos de apoyo y orientación a lo largo del proceso.
Entre las dudas comunes que uno puede tener a estas alturas es si con diez semanas será suficiente para conseguir el cuerpo que queremos. Hay que tener en cuenta que dependerá de cuáles son los objetivos que nos planteamos, además de cuál es la línea de salida de la cual empezaremos. No llegaremos tan rápido a la meta con alguien que nunca a pisado un gimnasio que con alguien que ya ha tenido una base de entrenamiento y lleva ejercitándose durante un tiempo. De modo que antes de empezar el plan, tendremos que trazar unos objetivos lo más realistas posibles.
Otra de las cuestiones que solemos plantearnos, está el número de días semanales que deberíamos ir para conseguir unos resultados buenos lo más rápido posible. Dependiendo de la experiencia personal y de lo grandes que sean los objetivos será más conveniente un entrenamiento más o menos constante. Otro factor a tener en cuenta sería la intensidad de estos. Sin embargo, generalmente lo adecuado suele ser alrededor de 3-4 sesiones por semana, evitando también el estilo de vida sedentario los días que no se entrene, manteniendo un cierto nivel de actividad.
A la hora de entrenar, los resultados serán más eficientes si entrenamos por patrones de movimiento en lugar de trabajar músculos concretos. De esta manera, trabajaremos varios músculos a la vez y el gasto calórico será aún mayor que si solo trabajásemos uno. Con este proceso reduciremos la grasa que necesitemos eliminar. Estos ejercicios son más prácticos ya que, al igual que en la vida deportiva y en el día a día, se trabajan nuestros músculos en conjunto, nunca por separado. Los días en los que no tengamos entrenamiento, sería conveniente realizar ejercicios suaves como caminar, por ejemplo. Que tengas un día libre no significa que puedas quedarte en el sofá sin hacer nada. Hasta el último detalle cuenta para lograr nuestras metas.
Fuera del gimnasio también tendremos que cuidar nuestras alimentación. La dieta que llevemos durante el proceso dependerá de si nuestro objetivo es reducir la grasa o aumentar la masa muscular. El campo de la nutrición es todo un mundo en el que cada persona tiene unas características diferentes. Es por esto y por la complejidad de llevar una rutina de gimnasio que cada más personas recurren al entrenamiento personal y a los centros de entrenamiento personalizado para poder lograr sus propósitos de manera efectiva.
