Una botella es un objeto cotidiano y anodino que pasa del supermercado a nuestra casa y acaba en la basura. Con suerte, se recicla y vuelve a transformarse de nuevo en botella... Pero eso es sin contar con el
poder de la creatividad.
Nishi Chauhan se ha formado en arquitectura y diseño industrial y le apasionan las formas y la escultura. Ha tenido la genial idea de utilizar
botellas usadas para transformarlas en
lámparas con forma de
tiernos y divertidos animalitos. Además ha querido aprovechar el saber-hacer de los artesanos de Karnataka en la India para trabajar la madera y completar el diseño.
Un diseño excelente que le ha valido el premio de diseño
Reddot en 2014.