"Pan con pan, comida de tontos", decía mi abuelo cuando se refería a cualquier cosa desabrida. Sin embargo, usar blanco con blanco parece ser "el look" a llevar, un nuevo capricho de moda derivado del desembarco minimal (en color, formas y géneros) inspirado en fines de los 90´s. Mirá cómo el encanto monocromático copa las calles y pasarela de la última edición de la Semana de la Moda en Nueva York y tomá nota de los tips que te dejamos para incursionar en la tendencia sin verte cual muñeco Michelin.
¡Blancas y radiantes!
Nos mintieron a todas, ¡no sólo el negro estiliza! ¿Vieron? Para eso, tenemos que hablar de l
a sagrada regla, el tip de todos los tips que consigue mostrarnos más flacas, altas y elegantes en minutos:
vestirse en monocromía, (en éste caso sería acromáticamente porque, técnicamente, el blanco no es un color. #nerd). Bien simple, sin contrastes, la atención se centra en todo el conjunto; no hay cortes, quiebres ni detalles en el aspécto integral del look.
Ahora,
¿qué tengo que saber antes de vestirme cual Don Jhonson? Anotá:
- Usá diferentes materialidades en un mismo look: algodones, denim, cuero, sedas, crepe, gasas, tejidos finos e incluso encaje. Con lo anterior, vas a evitar verte "igual", agregándo textura, saturación y diferentes matices de blanco a tu equipo.
- Animate a un look totalmente blanco, incluso en calzado. Si creees que es demasiado, acompañalo con sandalias en tono suela; es lo último.
- Prestá atención a los talles. Cuanto más holgado, suelto y cómodo, mejor.
- ¿Te faltan piezas blancas? Buscá denim bien gastado, al rescate de aquellas que quieren intentarlo pero dudan en comprar prendas tan claras.
- Superponer es la clave del asunto. Camisas largas con trasparencias por sobre shorts en lino; blusas por encima de faldas a la rodilla.
- ¿Nuestro estilismo favorito? Crop top blanco apenas rozando faldas acampanadas; muy lo más.