Nuestra gastronomía es rica en recetas tradicionales, entre las que destacan las recetas de Cuaresma. Y es que en esta época apetece degustar esos dulces que han pasado de generación en generación y que siguen perdurando en nuestro recetario.
Una de estas recetas tan tradicionales es la leche frita, un gran postre elaborado con ingredientes sencillos y humildes con los que se consigue un resultado de excepción que nos transporta inmediatamente a esta época, y a sabores y recuerdos de la infancia.
La leche frita tiene un sabor muy especial debido a la mezcla de aromas procedentes de la canela y los cítricos, y a la textura suave y delicada que le aporta el proceso de elaboración de la receta. Vamos con ella.
Para la leche frita
Para rebozar y freír
Para el rebozado podéis utilizar también harina, antes del huevo, que le dará mayor consistencia. ¿Qué os parece la leche frita? ¿Os animáis a probarla?