Consigue el fondo de armario perfecto (parte 2).

Tal como os prometí, hoy continuamos nuestra lista de imprescindibles para crear un fondo de armario perfecto con algunas prendas y accesorios más a los que podremos sacar partido en infinidad de ocasiones.

Sin duda, uno de los básicos más evidentes es el pantalón vaquero. Aunque contemos con más de uno en el armario, el vaquero perfecto para el fondo de armario es aquel de talle medio, sin decoración (ni desgastado, roto, etc). Según nuestra silueta nos favorecerán más los pitillo, rectos o anchos, pero debemos huir de formas exageradas: ni excesivamente skinny, ni grandes campanas.

Un gran clásico de estas listas es el LBD (pequeño vestido negro), pero no basta con cualquier vestido negro al azar. Debemos evitar que sea demasiado ajustado o corto, así como escotes tipo barca, palabra de honor... en favor de un cuello redondo o escote cruzado, según lo que mejor nos quede. Mi recomendación es que para esta prenda invirtáis en un tejido realmente bueno, ya que si no cambiáis de talla os puede durar incluso décadas sin pasar de moda.

Del mismo modo en que hace falta un vestido negro, también necesitamos una falda de este color y de largo medio, es decir, a la altura de las rodillas o un poco menos. Según nuestro estilo, profesión y silueta se adecuará mejor a nuestro armario una skater, una falda de tubo o una lápiz. Debemos valorar a cuál podemos dar más uso o, si podemos, adquirir una de cada.

Llegamos ya al capítulo de bolsos, en el que debería bastarnos con tres, aunque seguro que todas albergamos como mínimo el doble en nuestro vestidor. Lo esencial es contar con dos bolsos de tamaño grande para uso diario, tipo tote o shopping bag. Uno en tonos oscuros, como negro o marrón, y otro en claros, como beige o gris; evitando una vez más tonos estridentes que resulten complicados para combinar.

Finalmente, en lo relativo al calzado ya escribí en esta bitácora los zapatos que toda mujer debería tener, pero aquella lista se puede sintetizar más si cabe. Nos quedamos con las sandalias planas para el verano y un par de botas o botines para el invierno, bailarinas para entretiempo y, para ocasiones más formales, un zapato de salón de tacón medio/alto de estilo clásico, apto para cualquier estación y superviviente a todas las modas. Con esto terminamos nuestra lista para un fondo de armario perfecto, susceptible de ser ampliada una vez reunamos las prendas imprescindibles. ¿Qué os ha parecido? ¿Os falta algo para cumplir con todos los básicos?