¡S.O.S Piel deshidratada! Manual de supervivencia en invierno

Con la llegada de las bajas temperaturas la piel se resiente, la calefacción, el viento, el frío, la toma de medicamentos... todos ellos son factores que afectan a nuestra piel debilitando la barrera cutánea y deshidratándola. ¿El resultado? Una piel mate, áspera, descamada, que llega incluso a irritarse, rojeces, picores... unos efectos a todas luces indeseables que pueden minimizarse siguiendo un plan de acción con un único objetivo: una piel hidratada y confortable.
Recomendaciones para mantener la piel del rostro hidratada en invierno

Muchas personas, entre las que me encuentro, tenemos tendencia a la deshidratación. Aunque a todas las personas el cambio de tiempo les afecta en la piel teniéndola más seca en invierno que en verano, a unas les daña y deshidrata la temporada de frío más que a otras. Los resfriados conllevan la toma de medicamentos específicos que unidos a la continua agresión del pañuelo y la deshidratación por pérdida de líquidos a causa de la fiebre y demás síntomas derivados de la enfermedad, por otro lado los cambios bruscos de temperatura, en la calle aire y frío, en los transportes, tiendas, casa etc... la calefacción puesta, esto hace que la piel sufra y se resienta. Son muchos los factores que hacen que la piel luzca mate, áspera y deshidratada en épocas de frío pero siguiendo unas sencillas recomendaciones se pueden paliar estos efectos tan poco apetecibles y que restan confort a la piel.
1) Limpia tu piel 2 veces al día, tanto si te has maquillado como si no lo has hecho, esto hará que se eliminen las partículas de polvo, sebo y suciedad que se adhieren a la piel. Al enjuagarte no utilices agua demasiado caliente ni demasiado fría ya que ambos extremos deshidratan, irritan y resecan la piel.

2) Exfolia tu piel al menos una vez a la semana para eliminar células muertas y suavizar la piel, se verá más luminosa y lisa. Hazlo con un exfoliante suave como por ejemplo con mi exfoliante enzimático preferido.
3) Ponte más cantidad de crema y de una textura más rica que la que utilices en verano. La piel necesita una crema más untuosa dada su mayor necesidad de hidratación. No escatimes a la hora de aplicar el producto y hazlo con un buen masaje, la doble hidratación del ritual japonés saho es ideal.
4) Aplica semanalmente (o incluso 2 veces por semana) una mascarilla hidratante que aporte un plus de jugosidad y confort a la piel. Dos de mis favoritas en invierno son esta y esta. ¡Truco! Si aplicas debajo un aceite facial, como del que os hablé aquí, los beneficios de la mascarilla se potenciarán!

5) Cuando laves tu cabello durante la ducha ten cuidado con utilizar el agua muy caliente porque al caer en el rostro junto con el champú tiende a deshidratar, irritar o provocar rojeces. Si no eres capaz de poner el agua menos caliente intenta agilizar la ducha y que dure el mínimo tiempo posible.
6) Al aclarar los productos de limpieza facial con agua tibia seca siempre el rostro con pañuelos de papel (tissues) o una toalla limpia y seca en su defecto, así evitaremos infecciones y alteraciones cutáneas como granitos y dermatitis.
7) Tonifica tu piel después de la limpieza con lociones o tónicos libres de alcohol para evitar resecar la piel. Mi favorito desde hace muchísimo tiempo, que ya conocéis si sois lectores habituales del blog, es este.
8) No tengas miedo a utilizar aceites faciales para hidratar la piel en profundidad aunque tu piel sea mixta o grasa, esos tipos de pieles también se deshidratan y es necesario equilibrarlos para mantenerlos en óptimas condiciones. Si tu piel es seca seguro que ya te has enamorado de estas texturas oleosas. Os recomiendo el post sobre aceites faciales para repasar de qué forma funcionan y cómo usarlos.

9) Maquilla tu piel, las mujeres tenemos una ventaja sobre la mayoría de los hombres y es que nuestro maquillaje actúa de barrera protectora ante los agentes externos que agreden nuestra piel. Opta por una textura más fluida e hidratante en época de frío.
10) Y las dos recomendaciones que nunca faltan en el cuidado de la piel son la ingesta de agua y la protección solar. Bebe agua para hidratar el organismo y mantener tu piel jugosa y sana y por supuesto, aunque sea invierno, llueva o esté nublado no salgas de casa sin protector solar para evitar manchas y envejecimiento prematuro de la piel.


¿Cuales son vuestras armas para combatir los efectos del frío en la piel?



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