Sencillez, estilo rústico pero basado en una simplicidad que reina en toda la vivienda. Espacios limpios, tonos suaves y materiales naturales definen esta vivienda nórdica. Ambientes muy diáfanos, donde domina el blanco puro del continente con los colores neutros del mobiliario y la decoración. Mucha luz natural y ningún artificio en los detalles decorativos, la casa derrocha estilo sin perder funcionalidad y sin dejar de ser una casa para ser vivida. El salón raya el minimalismo rústico, no hay apenas muebles que recarguen los espacios y la cocina es enteramente blanca con algún toque sutil en negro. Y ya en el dormitorio se aprecia un toque más bohemio con esa cama elevada sobre una plataforma hecha con palés y cubierta con una colcha de patchwork. Una casa original y rústica para disfrutar este fin de semana. Disfrutad!!!