Bienvenido 2015
Hace tiempo un amigo nos dijo que teníamos que ir a visitar el pueblo donde vivía al norte de California, Mendocino. "Es el pueblo más bonito del estado". Yo no los he visto todos pero, después de estar allí, dudo mucho que sea mentira.
Cuando llegamos tuve la sensación de entrar en el decorado de una película, además tuvimos la suerte de disfrutar de unos días de sol preciosos después de dos semanas de lluvia.
Cada detalle del pueblo estaba en armonía con el resto, respetándose al máximo la arquitectura de sus casas de estilo victoriano.
El primer día fuimos a visitar el faro de Point Cabrillo, vimos pasar varios grupos de ballenas y disfrutamos del silencio y la paz de aquel lugar.
Nuestro amigo nos prestó una pequeña cabaña que tiene en pleno bosque y que utiliza para desconectar y escribir.
Sin cocina y apenas agua caliente, nos las ingeniamos para pasar una nochebuena que acabó siendo PERFECTA.
Siempre que llegábamos con el coche veíamos salir corriendo a un montón de cervatillos que bajaban de la montaña a pastar, sin duda un lugar de ensueño.
La mañana de Navidad fuimos a visitar Glass Beach (Playa de Cristal), se trata de una playa llena de pequeños trozos de cristal de diferentes colores que el mar redondeó y arrastró a la orilla después de que utilizaran un acantilado cercano de vertedero hasta el siglo pasado.
Una gran lección de la madre naturaleza que da mucho que pensar...
Si la vida te da limones, ¡haz limonada!.
En el faro llevo jersey y leggings de CALVIN KLEIN PERFORMANCE, gorrito y bufanda de H&M y botas de UGG.
En Glass beach, pantalón de ZARA KIDS, jersey y chaqueta de ZARA.
Y para acabar el post de hoy les dejo un fragmento de una entrevista a Carlos Santana que leí en la revista de la aerolínea con la que viajé a España, todo un regalo. Lo bueno hay que compartirlo:
Les deseo una mágica noche de reyes
Amor y luz
Raquel
