Bizcocho de vainilla sin huevo
Este bizcocho de vainilla sin huevo tiene un sabor excelente por la vainilla, que es un sabor que a mí me requetechifla. Y nadie notará que no lleva huevo. Las alergias alimentarias están a la orden del día y es muy probable que todos conozcamos ya a alguien que tenga alergia al huevo. Pero eso no es razón para dejar de disfrutar de un buen bizcocho.
Los huevos cumplen varias funciones en los alimentos cocidos en el horno. Por ejemplo, proporcionan estructura al coagularse con el calor, algo que por lo tanto es más difícil de conseguir en un bizcocho sin huevo. También los usamos para batirlos e introducir aire en la mezcla, al montarlos enteros o al montar las claras a punto de nieve.
En los bizcochos sin huevo solo podemos usar levadura química o impulsor para airear la masa mínimamente, por lo que tienden a ser más compactos que los bizcochos con huevo. Pero esto no quiere decir que no se consigan bizcochos muy aceptables sin huevo, este que os traemos es una muestra. La receta es una adaptación de Velocidad Cuchara.
Receta de bizcocho de vainilla sin huevo
Ingredientes:
- 450 g de leche entera
- 30 g de aceite de oliva
- 300 g de harina de repostería
- 250 g de azúcar blanquilla
- 20 g de levadura química
- Dos cdtas. de extracto de vainilla
Elaboración:
- Pasamos la harina de repostería con la levadura por un tamiz a un bol. Agregamos el azúcar y reservamos.
- En otro bol pesamos los líquidos: la leche y el aceite.
- Preparamos el molde. Lo untamos de mantequilla y lo espolvoreamos de harina. Yo les suelo poner una banda de papel de hornear para facilitar el desmoldado y que no se peguen al fondo, que es donde se pegan con mayor frecuencia los bizcochos.
- Añadimos los ingredientes sólidos a los ingredientes líquidos. Batimos a mano, con varillas eléctricas o en un robot, hasta que no queden grumos. La masa es bastante líquida. Le agregamos el extracto de vainilla.
- Vertemos la mezcla en el molde con cuidado de que no se nos mueva el papel. Metemos el molde en el horno calentado a 185 ºC, con calor arriba y abajo, en un nivel más bien bajo. Lo cocemos 50-60 minutos, según el horno, hasta que al pinchar con una brocheta esta salga limpia.
- Cuando esté listo lo sacamos y lo desmoldamos sobre una rejilla ayudándonos con el papel. Dejamos que se enfríe por completo antes de devorarlo.
A veces es complicado encontrar un dulce que puedan tomar todos en casa. Os aseguro que cuando mi familia se reúne, con una celiaca y una prediabética, nos cuesta un poquito coincidir. Por eso estoy segura de que los que tengáis alguien cercano con alergia al huevo vais a disfrutar de esta receta de bizcocho de vainilla sin huevo.
