Cuando preparo la maleta para mis viajes no suelo llevar demasiados zapatos, ¡ocupan demasiado espacio!, pero entre ellos siempre incluyo unos de tacón para salir a cenar o ir a alguna fiesta. Confieso que a veces los uso y otras solo me arrepiento de haber cargado con ellos todo el viaje, pero esta vez acerté en llevarlos porque fuimos de cenita a un sitio mono de Venecia y me apetecía dejar de lado las sandalias planas y las khaki que tanto habéis visto por aquí en estas últimas entradas, ponerme una mini y arreglarme un poco más ;). Las fotos las hicimos en la Plaza de San Marcos, uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad. ¡¡Espero que os gusten!! Mua.