COLGAR LOS TACONES



El bodegón de Meisel evoca una cercana primavera, aunque hoy esté nevando y haga un frío para recordar.

Acabo de ver por streaming el próximo invierno del hombre Miuccia y el de alguna mujer; soso sí, ya me lo comentaba ella ayer pero con zapatos de esos que te hacen desear que el tiempo pase rápido, de esos que te impacientan y empiezas a imaginarlos dentro de una cadena de producción, justo cuando le ponen la tapa a la caja.
Si, reconozco que tengo fantasías consumistas de futuro, algo que siempre me ha parecido excitante y bastante curioso; sobre todo porque, cuando esos zapatos estén disponibles no serán objeto de mi deseo. O quizás, no llegue a verlos nunca, o ni me acuerde. No tengo cura, soy una caprichosa virtual sin remedio.
Guardo zapatos imposibles, como oro en paño; si pudiera, les haría un mueble vitrina, y, en lugar de poner la porcelana fina, acomodaría mis zapatos, unos de frente, otros de lado, con luces indirectas y control de temperatura.
Los tacones; con los que ya no soy lo que era los colgaría en la entrada, por si un día me da por volver a subirme y dar unas vueltas por el pasillo, o bailar; que con tacones se baila de miedo, no creces, te creces. ¿Qué más podría hacer?

También podría hacer bodegones, como Meisel ....

  • Love
  • Save
    Add a blog to Bloglovin’
    Enter the full blog address (e.g. https://www.fashionsquad.com)
    We're working on your request. This will take just a minute...